miércoles, 3 de febrero de 2010

Tìa Marìa, la historia de Bagüa se repite




Quisiera comenzar preguntàndoles ¿Quièn de ustedes aceptarìa de buena gana que una mina se estableciera cerca de su casa, de su barrio o localidad? ¿Quièn estarìa de acuerdo que estè cerca del lugar donde crecen sus hijos, de lugar donde sus seres queridos se desarrollan, donde se encuentra una fuente de agua que les provee de vida, como tambièn a los animales y plantas que embellecen el lugar y son la fuente de su economìa?

Bueno actualmente los pobladores del Valle de Tambo atraviesan por esta pesadilla, los han colocado entre la espada y la pared respecto a la instalaciòn de esta mina Tìa marìa en el territorio que habitan : ¡¡o aceptas o aceptas !!. sòlo consideran un por respuesta, todo lo demàs no vale, es malo, es terrorista, y una serie de cosas y calificativos que los grandes intereses se encargan de vender.


La real decisiòn y deseo de estos pobladores que es la de un ¡no a la instalaciòn de la mina Tìa Marìa!, parece no tener valor alguno para nuestros gobernantes, o no pesa tanto como la de los grandes mineros. La democracia de la que tanto se habla y se habla, parece no existir para estos pobladores. Señores del gobierno: democracia significa "gobierno del pueblo" y no! "gobierno de los ricos". Pareciera que nuestras autoridades estàn confundiendo el significado de democracia con plutocracia, pues habrà que llevarles entonces un diccionario y la constituciòn polìtica, para que despuès de revisarlos de una buena vez, dejen en paz a nuestros compatriotas del valle de Tambo y escuchen su voz, que es la voz del pueblo en general. Dejen de estar permitiendo que se den una serie de jugarretas mal intencionadas y de la peor bajeza que tratan de manchar la imagen de cuanto poblador se interponga a los designios de la minera Southern y su nuevo proyecto Tìa Marìa, como si opinar y decidir sobre los destinos del lugar donde habitamos fuera un crimen, señores los seres humanos gozamos de la libertad de pensamiento, opiniòn que avala la constituciòn, tenemos derecho a la vida, a la igualdad al igual que ustedes.


Què fàcil es decir: a la minerìa, a la inversiòn, cuando no se vive en el lugar de los hechos, cuando son otros los que se tienen que aguantar una serie de padecimientos (contaminaciòn de fuentes de agua, de suelos, del alimento que llevan a la boca, del aire que respiran, de enfermedades terribles que afectan a sus seres queridos como consecuencia de lo anterior y etc,etc); cuando no se cumple a cabalidad con el papel fiscalizador y regulador con estas mineras y se les permite una serie de abusos, incumplimientos y acciones que atentan contra la salud y la vida de las personas y seres vivos que habitan sus alrededores, que se valen de chantajes y argucias par presionar la gobirno y se les deje seguir incumpliendo normas ambientales o que se les cree leyes especiales y se les amplie plazos y puedan hacer lo que quieran sòlo por que tienen la bandera de la inversiòn. Saben muy bien que no es una exageraciòn y que los muchos compromisos y promesas sobre ambiente, salud, preservaciòn; a los que se han comprometido estos inversionistas mineros han quedado en letra muerta, no nos pongamos pues de ingenuos a estas alturas pues señores.


Sòlo se les pide que respeten la decisiòn del pueblo del Valle del Tambo, ellos no quieren a la minera tìa Marìa y razones no les falta, dejen que ese pueblo decida su destino y opte por seguir con una tierra sana, bella, riquìsima en flora y fauna, con un mar portador de vida que seduce a todo visitante que tenga la atinada idea de animarse a visitarlo. Apoyemos a nuestros hermanos del Valle de Tambo, no seamos indiferentes, ellos sòlo quieren al igual que nosotros calidad de vida para sus familias, sòlo vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario